Pegado diapasón.
Compruebo por enésima vez que el alma queda perfectamente encajada en la ranura que he hecho:
Y luego me pongo con el encolado.
Cuando se pega una madera sobre la otra con cola, titebond en mi caso, se tienden a mover las maderas al apretarlas con los sargentos porque la propia cola actúa de lubricante, y esto es un potencial problema porque puede que la posición final de encolado no sea la que originalmente querías.
Esto hay que evitarlo en la medida de lo posible.
Hay mucha gente que lo que hace es colocar el diapasón sobre el mástil bien sujeto en la posición que quieren encolarlo, hacer un par de taladros finos o tres en alguna de las ranuras del diapasón que llegan a taladrar el mástil unos milímetros, luego quitan el diapasón y colocan unos palillos insertados en los agujeros del mástil. Luego encolan y se aseguran de encajar los agujeros del diapasón en los palillos que han puesto en el mástil.
A mi esto me parece una guarrada, primero porque estás taladrando el diapasón sin necesidad y segundo porque estás dejando restos de otras maderas dentro una vez encolado.
Así que después de mucho pensarlo, se me ha ocurrido poner unos topes que limiten el movimiento del diapasón lateralmente. Estos topes son restos de DM’s que van pegados con una gota de titebond.
He puesto como 5 topes por los lados y van ajustados con un margen mínimo de error (la separación de un cartón de una caja de aspirinas o similar). Así el diapasón no se moverá cuando encole y apriete.
Los topes se quitarán fácilmente con un toque de formón, además como están situados sobre parte de la madera que voy a quitar, no afectan para nada al futuro mástil.
Una vez encolado, lo dejo 24 horas bien apretado con sargentos para estar 200% seguro de que está bien seco y ya no se mueve. Luego empiezo a quitar madera que sobra por los laterales del mástil y diapasón.
De momento, este es el aspecto una vez encolado y habiendo quitado parte de la madera que sobra.
Se empieza a intuir que es un mástil.