withthc escribió:La base de los barnices nunca ha sido la parafina sino el aceite de lino.
Pero es que no estoy hablando de barnices, se está hablando de productos para nutrir (que no hidratar) el diapasón. Naturalmente que los barnices no llevan aceite de parafina. Yo barnicé una strato que me hice por piezas con capas de tung, primero diluido para mayor penetración y después de varias capas solo de aceite una ya mezclado con cera, terminando en acabado de solo cera. El tacto es espectacular, el mástil más suave y que mejor corre la mano que he tenido. Además el tung se va oxidando con el tiempo y el cuerpo ha cogido un color dorado precioso. Pero al diapasón le dí un trato especial. Es cierto que añadí muy poco de tung al principio después de pulir los trastes para terminar de sellar, algo casi innecesario porque es de arce tostado, pero desde luego nada de cera, y al año un poco de aceite dunlop de limón (que es parafina) de recordatorio. No quiero barnizar el diapasón, solo sellarlo un poco al terminar el montaje, y para que coja color y no se manche con los dedos. Luego ya no es necesario, solo hay que evitar que reseque demasiado. El resto de la guitarra sí necesita un barniz más grueso que cristalice y proteja la madera no solo de la humedad sino de roces, por lo que a los aceites y ceras se les suele añadir resinas (bueno, hablo de barnices a la antigua, ahora se pone nitro o poliuretano). No verás violines ni contrabajos nunca con el diapasón barnizado, solo nutrido. De hecho, en los violines buenos no se barniza ni el mástil con el mismo barniz que el cuerpo, tan solo aceite y cera para que corra bien la mano.
Me estoy haciendo una LP custom (muy customizada) y después de, trastear y ponerle el binding a un diapasón de ébano sí le he dado una capa muy ligera de tung diluido antes de pulir, pero no creo que sea necesario más (probablemente ni siquiera esa capa era necesaria). Y me apostaría algo a que el producto ese de herrera tiene, en efecto, una mezcla de tung y camelia... diluidas en una base de aceite de parafina, igual que el limón de dunlop.
