Siempre hubo en Paco de Lucía algo que me intrigó, es manera de tocar (rabiosamente rápida), me resultaba entre molesta y triste, rabiosa, casi con un tinte de amargura y rapidez del que pretende pasar un mal trago lo antes posible.
Ojalá me equivoque, y quizá sea así, ya que mi respeto hacia Él, era y sigue siendo grandísimo, aunque no más que el que tengo hacia otros admirados de la guitarra flamenca, entre los que se sitúa de primero, el maestro Sanlúcar, descanse en paz, ahora que puede.
Ojalá me equivoque, y quizá sea así, ya que mi respeto hacia Él, era y sigue siendo grandísimo, aunque no más que el que tengo hacia otros admirados de la guitarra flamenca, entre los que se sitúa de primero, el maestro Sanlúcar, descanse en paz, ahora que puede.
