Muy buenas...pues después de la review de la Fender Hellecaster de John Jorgenson, le toca el turno a otra de las signature que la custom shop de Japón le hizo a otro de los miembros de los Hellecasters, en este caso a Jerry Donahue.
Guitarrista muy respetado en este mundillo por su trabajo en Fotheringay y Fairport convention, así como en los nombrados Hellecasters, no es usual verle con una stratocaster.
Al igual que comentamos con el modelo de John Jorgenson, esta guitarra es bastante complicada de encontrar por tratarse de una serie bastante limitada, y al igual que los otros dos modelos de los miembros de los Hellecasters, tiene características muy especiales que hacen de ella un instrumento muy especial y singular.
Vamos al lío...
Construcción y componentes:
La guitarra es básicamente una strato estilo años 50 con peculiaridades muy especiales. En primer lugar, el cuerpo no está realizado en madera de aliso, sino de tilo (basswood), algo bastante usual en las Fender realizadas por Fender japan.
El acabado se llama sapphire blue transparent...es un acabado azul precioso que dejar ver la madera de fondo. En el cuerpo nos encontramos con un golpeador, que al igual que sucedía en la John Jorgenson, está realizado con un sparkle, en este caso en color azul y más tenue.
El él se encuentran tres botones tipo stratocaster que guardan una sorpresa...así como el primero de los potenciómetros es el normal de volumen, y el tercero regula el tono de todas las pastillas, el segundo de ellos es un falso potenciómetro...en realidad es un selector rotatorio de dos posiciones que modifica las opciones de configuración de las pastillas de la siguiente forma:
En la posición 1, la configuración de las pastillas es la normal de las stratocaster, esto es puente, puente y media, media, media y mástil y mástil.
Sin embargo, cuando se acciona la posición 2, la configuración pasa a ser puente, media y mástil con un condensador alternativo, puente y mástil, las tres pastillas con un condensador alternativo, y mástil.
Es decir, diez posibilidades sonoras dentro de una strato...una bendición y al tiempo una locura...
Las pastillas elegidas han sido, para la posición de puente, una Seymour Duncan con bobinado especial para conseguir un tono tipo telecaster que tiene una placa de acero como las de las tele en la parte interna del golpeador. En las posiciones media y mástil nos encontramos con dos Seymour Duncan APS-2.
El selector es el normal de tipo cuchilla de 5 posiciones.
El puente es un Vintage Synchronized en color niquelado, como todo el hardware de la guitarra.
El mastil, tipo años 50, con perfil en V bastante cómodo, está realizado en una pieza de madera de arce, y tiene los marcadores de posición en los lugares habituales, pero en lugar de ser negros, son de un plástico estilo nácar que llaman bastante la atención...en el traste 12, se encuentra un inlay con el nombre del grupo (Hellecasters), al igual que sucedía con la John Jorgenson, solo que en este caso, es en el mismo color nacarado que en los marcadores de posición. También tiene una aspecto tridimensional, como ocurría en la Fender Hellecaster.
En la pala, tipo años 50 y con el logo spaghetti de Fender, encontramos la firma del guitarrista, y en la parte trasera un clavijero tipo Kluson muy vintage que le pega de maravilla, así como el número de serie estampado en la madera.
Sonido y acción:
Hablar sobre el sonido de ésta guitarra no es difícil...es extenso...tiene tantas posibles combinaciones que en ocasiones te pierdes.
Digamos que es una mezcla entre el sonido típico de puente de una tele, con el medio y mástil de una strato...pero multiplícalo por todas las opciones del selector rotativo y las posiciones del selector de cuchilla...
La pastilla de puente tiene ese twang de las telecaster...es muy brillante, abierta, clara...preciosa.
La de medios es abierta, con buenos medios y buena salida, y la de mástil es igualmente abierta, con más graves, ideal para solos de blues o rock...muy compensadas las tres.
Es muy divertida de tocar y de probar todas las combinaciones, pero llega a marear...a veces no sabes con qué pastillas estás tocando.
Conclusión:
Una guitarra de magnífica factura, con un aspecto muy elegante y clásico, pero con ese puntillo especial de las Hellecasters (brilli brilli, como dice mi hija), con unas posibilidades sonoras increíbles y un tacto comodísimo. La mezcla perfecta, en cuanto a sonido, de una tele y una strat.
Por el contrario, tanto su aspecto, como lo lioso de sus posibilidades de accionamiento entre pastillas, que hace que parezca que haya que hacer un máster para comprenderla totalmente, hace que no sea del gusto de todo el mundo.
Espero que os haya gustado...un abrazo a todos.
Guitarrista muy respetado en este mundillo por su trabajo en Fotheringay y Fairport convention, así como en los nombrados Hellecasters, no es usual verle con una stratocaster.
Al igual que comentamos con el modelo de John Jorgenson, esta guitarra es bastante complicada de encontrar por tratarse de una serie bastante limitada, y al igual que los otros dos modelos de los miembros de los Hellecasters, tiene características muy especiales que hacen de ella un instrumento muy especial y singular.
Vamos al lío...
Construcción y componentes:
La guitarra es básicamente una strato estilo años 50 con peculiaridades muy especiales. En primer lugar, el cuerpo no está realizado en madera de aliso, sino de tilo (basswood), algo bastante usual en las Fender realizadas por Fender japan.
El acabado se llama sapphire blue transparent...es un acabado azul precioso que dejar ver la madera de fondo. En el cuerpo nos encontramos con un golpeador, que al igual que sucedía en la John Jorgenson, está realizado con un sparkle, en este caso en color azul y más tenue.
El él se encuentran tres botones tipo stratocaster que guardan una sorpresa...así como el primero de los potenciómetros es el normal de volumen, y el tercero regula el tono de todas las pastillas, el segundo de ellos es un falso potenciómetro...en realidad es un selector rotatorio de dos posiciones que modifica las opciones de configuración de las pastillas de la siguiente forma:
En la posición 1, la configuración de las pastillas es la normal de las stratocaster, esto es puente, puente y media, media, media y mástil y mástil.
Sin embargo, cuando se acciona la posición 2, la configuración pasa a ser puente, media y mástil con un condensador alternativo, puente y mástil, las tres pastillas con un condensador alternativo, y mástil.
Es decir, diez posibilidades sonoras dentro de una strato...una bendición y al tiempo una locura...
Las pastillas elegidas han sido, para la posición de puente, una Seymour Duncan con bobinado especial para conseguir un tono tipo telecaster que tiene una placa de acero como las de las tele en la parte interna del golpeador. En las posiciones media y mástil nos encontramos con dos Seymour Duncan APS-2.
El selector es el normal de tipo cuchilla de 5 posiciones.
El puente es un Vintage Synchronized en color niquelado, como todo el hardware de la guitarra.
El mastil, tipo años 50, con perfil en V bastante cómodo, está realizado en una pieza de madera de arce, y tiene los marcadores de posición en los lugares habituales, pero en lugar de ser negros, son de un plástico estilo nácar que llaman bastante la atención...en el traste 12, se encuentra un inlay con el nombre del grupo (Hellecasters), al igual que sucedía con la John Jorgenson, solo que en este caso, es en el mismo color nacarado que en los marcadores de posición. También tiene una aspecto tridimensional, como ocurría en la Fender Hellecaster.
En la pala, tipo años 50 y con el logo spaghetti de Fender, encontramos la firma del guitarrista, y en la parte trasera un clavijero tipo Kluson muy vintage que le pega de maravilla, así como el número de serie estampado en la madera.
Sonido y acción:
Hablar sobre el sonido de ésta guitarra no es difícil...es extenso...tiene tantas posibles combinaciones que en ocasiones te pierdes.
Digamos que es una mezcla entre el sonido típico de puente de una tele, con el medio y mástil de una strato...pero multiplícalo por todas las opciones del selector rotativo y las posiciones del selector de cuchilla...
La pastilla de puente tiene ese twang de las telecaster...es muy brillante, abierta, clara...preciosa.
La de medios es abierta, con buenos medios y buena salida, y la de mástil es igualmente abierta, con más graves, ideal para solos de blues o rock...muy compensadas las tres.
Es muy divertida de tocar y de probar todas las combinaciones, pero llega a marear...a veces no sabes con qué pastillas estás tocando.
Conclusión:
Una guitarra de magnífica factura, con un aspecto muy elegante y clásico, pero con ese puntillo especial de las Hellecasters (brilli brilli, como dice mi hija), con unas posibilidades sonoras increíbles y un tacto comodísimo. La mezcla perfecta, en cuanto a sonido, de una tele y una strat.
Por el contrario, tanto su aspecto, como lo lioso de sus posibilidades de accionamiento entre pastillas, que hace que parezca que haya que hacer un máster para comprenderla totalmente, hace que no sea del gusto de todo el mundo.
Espero que os haya gustado...un abrazo a todos.
