Marty vuelve a demostrar que es un músico impresionante y capaz de hacer de todo en esta interpretación de la segunda mitad del último movimiento del concierto para piano y orquesta Nº 2 de Rachmaninoff.
Personalmente me hubiera gustado más si hubiese usado una distorsión más suave, en algunos momentos la guitarra no parecía muy integrada con la orquesta.
Personalmente me hubiera gustado más si hubiese usado una distorsión más suave, en algunos momentos la guitarra no parecía muy integrada con la orquesta.
