Surrealismo y situaciones incontrolables en los directos

noyk escribió:

- ¿Que haces?
me contesta
- Poniéndolas duritas.

Joer, pipa gratis y encima os quejáis

En medio de un tema, a un gracioso sólo se le ocurre acercarse a la mesa y subir un fader a lo bestia. Coincidió que era el mío, y justo estaba en un pasaje con palm muting. Temblaron las ventanas que yo creo que no se rajaron de milagro

No aguanto que extraños toquen mi equipo, me pongo violento. Odio a los niños en los bolos, revolotean entre los instrumentos y ya se lo que pasa, pisa cable y guitarra de 2000 euros en dos cachos.

En la última banda en la que estuve, el batería que teníamos era un flipado de Tomy Lee y quiso emularlo con las baquetas con fuego... el espectáculo guay, el tema es que cuando fue a dejar la baqueta prendida en el recipiente con agua para apagarla tras el solo de batería, la puso en el vaso del mini del whisky... el resto, os imagináis las consecuencias... yo salí cagando leches para coger las guitarras y quitarlas cuando vi venir al maromo de la sala con el extintor...

Yo también tengo unas cuantas, pero tengo memoria de pescado y se me olvidan... aparte del típico borrachín que baila solo al pie del escenario.

Me acuerdo una, era un concierto grande, probablemente el más grande en el que he estado, ahora no recuerdo pero hablamos de varias miles de personas, era un anfiteatro. Eramos un grupo de apoyo e ibamos a tocar varios temas con varios cantantes (eso ya estaba controlado). Pero, un cantante iba a participar, pero éste traía sus backing tracks, él iba en medio de nuestra participación, es decir, tocábamos antes y despues de él por lo que no bajamos del escenario mientras él participaba.

No estabamos en primera línea, pero tampoco escondidos tipo "La Voz". Este hombre, (era ya alguien mayor) estaba componiendo para su nueva producción y como nos conocía más o menos, antes de cantar su repertorio con sus backing tracks, anunció que quería cantar una de su nuevo disco (que aun no había grabado) y nos pidió publicamente que lo acompañáramos con los instrumentos...

...Madre mía, el hombre empieza a cantar, y todos nos miramos, mientras tímidamente ibamos, con volumen discreto, intentando al menos saber en que tono estaba cantando, una vez identificado el tono, intentar seguirle... Dios, qué desastre, el batería (que es un tío muy, muy bueno) no podía pillar el ritmo, lo único que se oía era el acorde de resolución cuando finalizaba una frase o una estrofa, mientras el baterista arrancaba con un ritmo y paraba, arrancaba y paraba... todos sudando frío...

Para más inri, el hombre soltaba frases tipo "ya la van pillando los músicos!" y cosas así, el hombre terminó y no fuimos capaces. Yo por lo menos estaba muy cortado con la situación, es que esas improvisaciones, en eventos tan importantes como era ese... no sé. Todos nos mirábamos en plan "trágame tierra".

Recuerdo que, tiempo después, escuché el tema ya grabado y era una especie de Latin Jazz super sincopado con acordes de esos que parece que tocas el piano con los puños y nosotros, chavales roquerillos cuatrocuarteros... jejeje.

#16 Jajaja todo un lince el cantante ése...

¡Otra!

Con la orquesta (pa variar) una nochevieja en un pueblo perdido de la sierra extremeña, fiesta organizada por el ayuntamiento, en la caseta municipal. La gente era así como muy rústica, la mitad iban en chandal, nadie se había arreglado ni un poco, me llamó la atención. La caseta bastante grande, pero abierta por los extremos. Como el escenario era muy alto, nos pegaba un corrientazo que lo flipas, no he pasado más frío en mi vida, tocar con las manos azules no se lo aconsejo a nadie, que dolor.

Pues si no teníamos bastante con el frío glacial, a algunos hdp les dió por tirarnos petardos al escenario, para que entráramos en calor supongo. Tuvo que salir el alcalde (muy simpático, también en chandall) al escenario a pedir que por favor no nos tirasen petardos. Qué gente más bestia, parecía el pueblo de Gila.

En fin, tocar helado mientras esquivas petardos ha sido también bastante surrealista.

#14 De esa aprendimos, ya no dejo los instrumentos fuera del estuche a no ser que el escenario este vigilado.

#16 A mi me paso una parecida. En el colegio mayor de la universidad haciamos todas las navidades un bolo. Nos juntábamos el mes de antes todos los que sabíamos tocar algo y nos repartíamos los temas. La parte chunga era la de encontrar cantantes, porque a la peña le daba algo de vergüenza, pero siempre acabábamos "jodiendo" a unos cuantos, ya que la gracia del tema era sacar a escenario a gente que normalmente no canta. Ojo, que alguna sorpresa te llevabas... el caso que un colega se apunto para cantar "sin documentos" de los rodriguez y un par de semanas antes estábamos que si en sol o en la, porque en la primera parecía que cantase desde una tinaja y en la segunda no llegaba. El caso es que al final el tipo se rajo y lo dejamos ahí.

El día del bolo, a mitad de concierto el menda se sube al escenario (totalmente borracho) y nos suelta "en sol, y despacito". Imaginad el percal: dos semanas sin tocar un tema que ni siquiera sabíamos en que tono iba, con mil ensayos de otros temas encima... salio lo que salio, menos mal que todo el mundo pensaba que la culpa era del cantante, porque ni la letra se sabia.

Cuando tenía 19 años estaba en una banda de Punk. Un viernes por la noche nos presentamos en un hoyo de mala muerte y antes de entrar noté que fuera se estaba montando una gresca. Dentro, el bartender me dijo que era porque algunos Punks querían entrar sin pagar la entrada pero como las peleas en estos sitios son comunes no le preste mucha atención al asunto y fuimos a prepararnos.

Esa noche eramos dos bandas las que íbamos a tocar. La primera era de hardcore y terminaron su set sin problemas. Después de un rato el dueño nos dice que es nuestro turno y comenzamos a tocar pero en la segunda canción comenzaron a sonar impactos en la fachada del local.

Como dije, eso era un hoyo de mala muerte y las "medidas de seguridad" y toma de decisiones fueron lo que se esperaba de un sitio así:

-Primero sube el dueño al escenario, detiene el show y desde arriba grita que los Punks que no pagaron estaban fuera atacando el lugar con piedras y botellas y ordena que se cierren las puertas para que no puedan ingresar. El problema es que había exceso de publico y en cuestión de minutos el sitio comenzó a tornarse sofocante, razón por la cual los asistentes comenzaron a perder la calma, hubo un par de desmayos y algunos comenzaron a pelear con el staff de seguridad para que abrieran las puertas y pudiéramos salir.

-Luego el dueño ordena que se apaguen luces, audio y ventilación, y pide que todos guardemos silencio. Hasta hoy me sigo preguntando si eso era para confundir a los atacantes o porque quería una masacre ahí dentro.

-Al no funcionar nada de esto, pues las botellas contra la fachada seguían lloviendo, el tipo comienza a formar una especie de brigada para salir y confrontar a los agresores a cambio de dos cervezas por voluntario porque claro ¿Punks llamando a la autoridad por ayuda? ¿Involucrar a la policía para que descubra que en el sitio hay exceso de gente y que varios de los asistentes llevan armas blancas o drogas? ¿Estamos locos?

Como dije, tenía en ese entonces 19 años e hice lo que cualquier joven de 19 haría por dos cervezas: me uní con mi bajista a la brigada. El batería, un tipo rumbo a sus treinta y más sensato, dijo que él pasada de arriesgar el físico y que se quedaba dentro a cuidar el equipo.

"Nada de navajas" fue la consigna antes de salir porque claro queríamos pelear a cambio de cerveza más no coser a alguien a puñaladas: responsabilidad ante todo. Entonces los armados dejaron sus navajas pero se hicieron con botellas y otros se quitaron las cadenas y cinturones de pinchos para usarlos como armas. Mi bajista y yo, tipos que se creían Punks, sin cinturones de pinchos o cadenas, tomamos nuestros cables de instrumento para usarlos como látigos.

Una vez fuera pensamos encontrar un buen numero de atacantes pues los impacto de botellas eran nutridos. Sin embargo, una vez que los localizamos, contamos a solo 6 de ellos. Sobra decir que al ver a cerca de 30 tipos armados con botellas, cadenas, cinturones y cables de instrumento esos 6 salieron huyendo.

Moraleja de la historia: 1) los bateristas siempre te dejaran solo en las peleas y 2) si vas a arriesgar la vida por cerveza que sea por más de 2 botellas: créanme, la cerveza pierde efecto cuando eres joven, estúpido, Punk de medio pelo y tienes la adrenalina hasta el tope

Que historias tan curiosas como interesantes, ahí va alguna de mis experiencias;

Hace unos 5 años nos salió un bolo en Bourdeaux (Francia) en una sala muy underground, era un festival de metal extremo de muchas bandas, y una de las bandas tuvieron muchos problemas de sonido durante su actuación, lo cual les molestó notoriamente, y abandonaron en escenario indignados y pagando su malestar con el público que se quedó un poco alucinado. Se marcharon al backstage y procedieron con el cambio al siguiente grupo.
Pues bien, los tipos de esa banda decidieron pagarlo con el resto de bandas y rociaron el backstage con gas pimienta, y se largaron rápidamente.
Nuestra cantante entró al backstage a buscar algo y salió medio asfixiada por el gas, al igual que otros músicos.
Tuvieron que desalojar la sala entera y ventilar durante media hora hasta que se disipó el gas...
Después estábamos todos medio mareados, con los ojos llorosos y tos, un horror de concierto.
Si les llegamos a pillar infraganti madre mía la que les habría caído...

Yo recuerdo uno de mis primeros conciertos con 18 o 19 años en una casa okupa cerca de Barcelona. Teloneábamos a un grupo de punk cuyo nombre nunca olvidaré: Kancer de Sida. El tema es que en eso que después de montar y hacer las pruebas de sonido salimos al escenario y nuestro batería todo desesperado gritando "Me han robado el taburete!". Pero no se lo habían robado, no. Un grupo de punkis asistentes al concierto lo "había tomado prestado" para tirarse unas líneas de algún polvo blanco. Total que tuvimos que esperar a que los susodichos terminaran con lo suyo para empezar el concierto.

A mi en un concierto de despedida de un garito que estaba petado de gente, me viene un compi del curro todo pedo diciéndome: ”tío ponte esta peluca” llevaba una peluca rubia en la mano, y yo por darle el gusto me la pongo y me chorreaba liquido por el flequillo xddd, le digo que de donde la había sacado y me dice “del suelo”... ni os imagináis lo que había por aquel entonces en aquel. Jijiji

Tocando en la sala de actos de un instituto en Gijón....estabamos tocando un tema y nos interrumpió un paisano que se quejaba de que no le dejabamos dormir...el caso que el instituto estaba de los edificios más próximos a unos 100 metros, pero el buen hombre lo notaba......era un concierto de versiones de Pearl Jam que habíamos montado con gente de alli y luego nos iban a devolver la visita a Cantabria...había dos palomos que decían que tocasemos algo cañero mientras el señoruco marchaba, asi que me puse a tocar Creeping death y la gente se volvió loca, el bateria me acompañó unos compases y ahi quedó la anecdota