No sé si es ético contar esto en público pero ahí va la historia de la adquisición de mi último instrumento.
PRÓLOGO
En las semanas previas a mi cumpleaños y como en casa estamos en obras y con la cabeza a mil mi esposa me dice que no me ha comprado nada y que si quiero algo. Yo la tranquilizo con que no hace falta y que quizá me compre un libro de partituras para un instrumento que me había comprado antes (es otra larga historia) y si tal lo contamos como regalo. Pero lo dejo pasar. Pasa mi cumple y ni me entero.
CAPITULO 1
Unas semanas después me encuentro un anuncio en otro foro donde un usuario vende un instrumento (no guitarra) que fue un regalo inesperado y apenas ha tocado tres veces pero se ha encaprichado con otro y tiene con su esposa el acuerdo de "one out, one in" y como el nuevo ya lo tiene escondido por la casa necesita librarse ya de uno para poder disfrutar de él...
O sea, un hermano en la "desdicha" del GAS que bien podría estar participando en este hilo.
Como el instrumento lo vende a la mitad de su precio nuevo y es algo de lo que andaba yo detrás, a mi me entra la prisa y tras pedirle fotos y datos decido "ayudarle" y se lo compro. Pago por paypal y en menos de 24h el paquete ya estaba en mi casa...
...bueno, en la de mis padres.
CAPITULO 2
En mi anterior intervención en este hilo hablaba de ir con la verdad por delante y las cartas boca arriba y blablabla. Pero aquí estamos con que yo estaba practicando la política de hechos consumados y no sabía cómo lavarle la cara a la situación. Un par de días después, aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid fui a visitar a mis padres (unos santos), justo un día que también pasé por el súper y que además había salido a dar una clase... Así que llegué cargado y ponerme a colocar compra y guitarra y mochila y "esa misteriosa caja de cartón" fue natural y nada sospechoso. Bien escondida la dejé.
Faltaba la escena final y no sabía cómo encararla. Vino en mi ayuda uno de los consejos de este hilo...
CAPÍTULO 3. Desenlace.
Llevaba ya un par de días la caja escondida y yo mordiéndome las uñas cuando me llegó la inspiración y vi claro el momento.
Acabábamos de comer y los niños aún no llegaban del cole. Ella estaba viendo su programa favorito en la tele y se estaba echando unas risas con las tonterías del presentador...
DISELO CUANDO ESTÉ DE BUEN HUMOR!!
Discretamente me fui al cuarto donde guardaba el paquete y cuando escuché que llegaba la publicidad comenzó la función
- "OSTRAS PERO QUÉ GUAY!!! JOOO GRACIAS CARIÑO!! DE VERDAD QUE TE DIJE QUE NO QUERIA NADA"
Aparezco con el paquete abrazado y cara de niño el día de Reyes (para esto tampoco tuve que fingir mucho), voy hasta ella y le planto besos y abrazos, todo muy exagerado y sobreactuado.
-"DE VERDAD, COMO SUPISTE QUE BUSCABA UNO DE ESTOS? (pongo mayúsculas porque realmente estaba levantando la voz para hacer la payasada con grandes aspavientos) Y JUSTO DE ESTA MARCA QUE ME ENCANTA!! ERES LA MEJOR, SIEMPRE VAS UN PASO POR DELANTE DE MI"
Mi mujer, que de estúpida no tiene un pelo, entendió TODA la situación al instante, pero yo estaba llevando tan al extremo ridículo la pantomima que no pudo evitar partirse de risa.
Una risa que sonaba a "Misión cumplida".
Por supuesto me preguntó:
- Y esto de dónde sale?
Pero yo tenía esa respuesta preparada:
- Ha pasado todas las cuarentenas
Tuve que dar alguna explicación más y ahí sí, ya sinceridad total. Pero el trabajo estaba hecho. Además, la baza de que "me debía" un presente jugó a mi favor, su regalo finalmente es no tirarme de las orejas

FIN
Sé que me he pasado tres pueblos con el texto, pero me apeteció compartirlo de esta manera por si arranco una sonrisa o dos.
Aún así opino que mejor la verdad por delante. Quien nos quiere y nos conoce nos comprende y ve la felicidad que nos producen los juguetes. Y si no, igual es que no nos quiere tanto!!
PD: mis padres también se encontraron una vez un objeto delante del led rojo REC del VHS un viernes por la noche
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