Beetronics es una pequeña empresa afincada en California y dedicada a la fabricación de pedales de efecto, formada por “un guitarrista, un baterista, un periodista, un arquitecto y un perro”. Aunque ya habían realizado diversos modelos de pedales custom, este verano presentaron dos modelos de serie, el WhoctaHell y el Octahive. El primero de ellos persigue obtener sonoridades de fuzz más extremas y experimentales, mientras que el segundo se mantiene más cerca de lo clásico (su circuito está basado en el Tycobrahe Octavia de los 70). En cuanto a lo estético, ambos presentan un chassis que simula desgaste, combinado con potenciómetros y switches de diseño diverso, como si hubiesen sido sustituidos por necesidad. Otro detalle curioso son las placas que hay en su interior, que tienen forma de colmenas y abejas, motivos relacionados con el nombre de la empresa.
El WhoctaHell es un Overdrive/Fuzz que tiene la posibilidad de añadir una octava grave con un carácter estilo sintetizador de 8 bit. Ambas opciones se pueden utilizar de forma independiente, pero según sus fabricantes, se pueden llegar a sonidos muy interesantes combinándolas. Incluso es posible añadir una octava aún más grave, mediante el uso de un interruptor. Como se puede apreciar en el vídeo, en determinados momentos llega a sonar casi como un videojuego.
El Octahive es en realidad un fuzz más cercano a lo que la mayoría estamos acostumbrados, pues se basa (como hemos comentado antes) en uno de los circuitos más famosos, el del Octavia. Nuevamente, incluye la opción de activar o desactivar una octava, que en esta ocasión es una octava aguda, aumentando su versatilidad y permitiendo obtener diversos tonos solistas. Con la octava activada es posible hacerlo sonar cercano a un Ring Modulator, mientras que con la octava desactivada es posible lograr un sonido "más grueso y cálido", más apropiado para tocar acordes.
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