El revival del Metal Zone que comenzó el año pasado parece no extinguirse del todo, y es que a pesar de las muchas bromas que hay alrededor del mismo, muchísimos de sus usuarios lo reivindican. Y entre ellos debe encontrarse el equipo de Mercuriall, una compañía que pasó del anonimato a una fama consistente gracias a su colección de plugins para guitarristas. Hay que reconocer que la estrategia de Mercuriall es muy atractiva: plugins sencillos, habitualmente con un aspecto idéntico al producto que emulan, con un sonido más que notable y — lo más importante —, en muchos casos gratuitos.
Siguiendo con su estrategia, Mercuriall ha puesta la mirada esta vez en uno de los clásicos del gigante japonés de los pedales, Boss. Estamos hablando del Boss Metal Zone, que se reencarna ahora en forma de plugin, el MT-A, que recrea en teoría el sonido que nos entregaría el pedal real. Su uso está indicado para funcionar antes de un emulador de amplis digital (la versión virtual del “conectarlo al input de un ampli”) o incluso para ser usado como preamplificador por sí mismo, compañado de un cargador de respuestas a impulsos o emulador de altavoces equivalente.
A nivel de interfaz, no podría ser más sencillo: tiene los mismos controles que presentaba el Metalzone original, eso sí: dispuestos por separado (en lugar de apilados de forma concéntrica) para hacer su uso más sencillo. Eso quiere decir que disponemos de ganancia, volumen, y tres bandas de ecualización, de las cuales podemos modificar la de medios para precisar mejor su centro frecuencial. Adicionalmente, tenemos un selector para trabajar en Mono o en Estéreo y un vúmetro para medir la ganancia de entrada. Como decíamos, ese plugin es gratuito, por lo que si queréis probarlo, podéis descargarlo en el siguiente link.
Más información | Mercuriall
En tiendas
- Boss MT-2 Metal Zone Distortion: 125€ en Thomann
