Walrus Audio Melee: distorsión y reverb a la vez controlados por un joystick

El concepto de pedales en que Walrus Audio sigue profundizando son bastante propios del momento actual. Pasada ya la gloria de lo analógico y la locura de lo digital, los diseñadores tratan de destilar los puntos fuertes de cada uno, que suelen ser el sonido en el caso del primero y la flexibilidad de control en el caso del segundo.

El Walrus Melee es un buen ejemplo de ello. Es un pedal que reúne dos efectos elegidos con puntería, distorsión y reverberación, pensando en todos aquellos que amen los sonidos shoegaze. Para sacarle todo el partido a esta unión hay dos elementos clave, uno es el joystick que permite controlar con una sola mano la cantidad de distorsión y la mezcla de la reverb, con el que nos imaginamos creando sonidos que se mueven lentamente para transformarse. El otro punto que creemos que será una herramienta muy potente es la posibilidad de elegir el orden de los dos efectos, ya que aunque lo común es poner la saturación antes de la reverb, es sabido que la opción contraria crea un muro caótico de sonido pero de gran belleza cuando se sabe aplicar.

Sólo hay un tipo de saturación, pero tres algoritmos de reverb que podemos cambiar al vuelo presionando a la vez los dos footswitches: una cavernosa y amplia, otra octavada (sacada de los algoritmos del popular pedal de la misma marca SLÖ) y una reverberación en reverse. La ecualización no puede ajustarse al detalle, pero hay un selector de tres posiciones que nos permite tres ecualizaciones básicas. Lo mismo pasa con el decay, que no tiene potenciómetro propio, pero sí un selector de tres longitudes de decaimiento de la reverberación. Selector que además permite, cuando mantenemos presionado el footswitch de bypass, activar o desactivar una modulación, con dos grados de intensidad.

Por último, el footswitch derecho también da lugar a un buen número de prestaciones. Al mantenerlo presionado podemos hacer incrementar las colas de la reverb para crear una sensación de ascenso, que volverá al punto de partida cuando soltemos el pedal. Si simplemente lo encendemos, dejaremos "congeladas" las repeticiones de la reverb, creando un colchón de sonido que finalizará cuando volvamos a presionar el mismo pedal. No hemos encontrado en el manual si el botón de bypass también activa el efecto de forma momentánea cuando lo mantenemos presionado sin soltarlo, en otros pedales de Walrus era así.

El pedal tiene un requisito de 200mA de intensidad y su precio estará entorno a los 349 euros.

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