La compañía alemana asegura que este amplificador programable a transistores con emulación de válvulas es el combo 1x12" con "el mayor sonido jamás producido". Y ello gracias al diseño del mueble con puertos Thiele/Small, que permiten al altavoz Celestion Creamback que monta poder liberar todo su potencial sonoro y ofrecer más rendimiento que en otros recintos.
