Un vistazo a los nuevos Nux Amp Core Studio, Komp Core Deluxe MKII, y Drive Core Deluxe MKII
Aunque Nux dedica enormes energías a producir y vender multiefectos, nunca dejan de prestar atención también al mundillo del pedal individual: su serie Core es una de las más populares ya que mantienen dicho formato al tiempo que incluyen algunas prestaciones más propias de multiefectos. Ello crea interesantes equilibrios entre la facilidad de uso y paz mental que dan los pedales individuales, al tiempo que obtenemos alguna comodidad extra por no mucho dinero.
Ya hace tiempo que existe esta serie, ofreciendo especialidades que cubren terrenos como la modulación, el delay o el looping. Hoy, en la oficina de Guitarristas, le echamos un vistazo a tres de los más recientes, el Nux Drive Core Deluxe MKII, el Komp Core Deluxe MKII y el muy, muy interesante, Nux Amp Core Studio. Pasamos a contaros cómo fue la experiencia de poderlos probar en una mesa pedalera — que, por cierto, era una Nux Bumblebee S con una fuente de alimentación Nux Zeus.
Lo que distingue la serie Core de Nux
[Índice]Los tres pedales de la serie Core que probamos comparten un formato compacto, similar al de un pedal individual estándar, pero con prestaciones que van más allá de un simple on/off y perillas básicas. El Komp Core Deluxe MKII es un compresor analógico puro, sin memorias ni pantallas digitales, enfocado en ofrecer control preciso sobre la dinámica. El Drive Core Deluxe MKII, también analógico, incorpora un selector que permite alternar entre varios tipos de overdrive, aprovechando circuiterías similares con variaciones sutiles para emular pedales clásicos. Finalmente, el Amp Core Studio es el más avanzado de los tres, un emulador digital de amplificadores que se posiciona como una plataforma versátil para grabación y directo, con opciones como MIDI, loop de efectos y respuestas a impulso personalizables.
Diseño y facilidad de uso
[Índice]El diseño de la serie Core prioriza la practicidad, con chasis metálicos robustos, no exentos de un cierto peso, pero sin exageraciones. El Komp Core Deluxe MKII presenta un footswitch con un clic audible y algo duro, típico de algunos pedales analógicos. Afortunadamente el clic que oímos no parece trasladarse al audio. Es curioso, porque es el único de los tres que lo presenta. Pero claro: el Amp Core Studio es digital, y el Drive Core Deluxe MKII como veremos luego, tiene un footswitch con función hold, por lo que seguramente no es el mismo mecanimos. Sus controles, como volumen, tono, blend y sustain permiten ajustes rápidos sin menús complicados, aunque hay un par de ellos que, por no ser comunes en los compresores del mercado, pueden requerir algún vistazo al manual. Estamos pensando en el control Blend de mezcla, el control clip o el selector de modo "humbucker/single" — así lo describe el manual.
El Drive Core MKII sigue una línea similar, con perillas para gain, tone y level, más un selector rotatorio para elegir entre modos de overdrive, lo que lo hace fácil de entender al primer vistazo. Sin embargo, es en el Amp Core Studio donde el diseño brilla con mayor intensidad: incluye una pantalla clara para navegar por presets y escenas, botones dedicados para navegar por secciones como amplificador/IRs/efectos, y conexiones versátiles como USB para grabar (puede ser interfaz de audio) o editar los sonidos en el ordenador. Además, su integración con MIDI lo hace ideal para setups complejos con switchers o controladoras.
Sonido y características del Komp Core Deluxe MKII
[Índice]El Komp Core Deluxe MKII entrega una compresión analógica y efectiva, y con una cierta variedad gracias a que podemos jugar no sólo con el control sustain, sino también con el excelente control Clip, que regula el nivel de entrada. Aunque el saturar la señal es algo que es competencia de otras familias de pedales, este sutil control "engorda" la señal de una manera que le da un toque de interés al resultado, especialmente en compresiones un pelín exageradas con fines artísticos.
Los controles con los que he tenido menos feeling de todo el conjunto han sido el de blend y el selector Attack. El primero no acaba de cumplir mis expectativas: a mi parecer, no hay un crossfade suave entre la señal sin efecto y la comprimida, sino que da pie a algunos altibajos sonoros que hacen realmente difícil el ajuste sin estar adaptando el resto de perillas constantemente y desbaratando nuestros planes. Por su parte, el selector Attack está bien y no tiene nada malo, es solo que las indicaciones prometen que una posición es mejor para humbuckers y otra para singles, y no coincido para nada con ellos. Pero puede ser algo personal.
Sonido y características del Drive Core Deluxe MKII
[Índice]El Drive Core Deluxe MKII se presenta como un overdrive analógico polifacético, que con un selector que emula varios pedales clásicos como el Red Dirt, el Tube Screamer TS808, el TS9, la versión MKI del propio Drive Core MKI de NUX, el Steel Singer Drive de NUX, el Boss OD-1, el MXR Distortion + o el Nobels ODR-1. Esta variedad permite transiciones suaves entre overdrives suaves y más agresivos, posiblemente basados en circuiterías analógicas similares con ajustes en componentes para diferenciarlos. El pedal incluye una función boost activable por footswitch (al mantenerlo pulsado), que eleva el volumen sin alterar el gain, perfecta para solos. El LED cambia a color rojo para avisarnos de que está activada.
Aunque los modos comparten similitudes inherentes a su naturaleza analógica, resultan prácticos para guitarristas que buscan un pedal más divertido y variado que los habituales del mercado, especialmente en contextos rock y blues. Los dos modos que son marcadamente más distintos probablemente son el MXR Distortion +, donde la cantidad de ganancia y la agresividad se incrementean — aunque también la estridencia — y el Boss OD-1, que tiene marcadamente una respuesta más mediosa. El resto, siendo sinceros, se podrían confundir fácilmente, pero tienen sus matices cuando uno los mira con microscopio.
Sonido y simulaciones del Nux Amp Core Studio
[Índice]Aquí llega la estrella de la comparativa, aunque lo decimos sobre todo por su diseño de funciones, y quizás no tanto a nivel sonoro.
Este pedal digital emula una amplia gama de amplificadores clásicos, desde Fenders limpios hasta Marshalls y opciones de alta ganancia como Bogner o Soldano, separando la sección de cabezal y pantalla para una mayor flexibilidad de combinatoria. En pruebas, los sonidos varían en calidad: algunos, como ciertos Marshalls o el Bogner, entregan tonos más o menos convincentes desde un primer modelo, mientras que otros, como el JCM 2000 o Soldano, requieren ajustes para sonar bien, un fenómeno que ya observé en los multiefectos de la serie MG de NUX. Ahí también entra en juego el elegir la simulación de altavoz adecuada, un apartado en el que también hay altibajos. Afortunadamente, probando varias combinaciones o añadiendo nuestras propias IR's a la memoria del Amp Core Studio, uno acaba obteniendo un sonido correcto.
La integración con pedales externos es excelente, "tragándose" overdrives y modulaciones sin problemas, y su loop de efectos permite colocar armonizadores o delays entre el previo y la simulación de altavoz para un aprovechamiento óptimo de esos pedales caprichosos. En grabación, actúa como interfaz de audio vía USB, capturando señales procesadas y crudas simultáneamente, y su MIDI permite control remoto, ideal para integraciones complejas.
El Amp Core Studio puede memorizar presets o escenas: los primeros nos permiten transformaciones completas de un sonido a otro, tanto en la selección de ampli y pantalla como en el orden de la cadena del resto de bloques, que comprenden el ajuste individual de puerta de ruido, la activación del loop de efectos y de la ecualización.
Las escenas, por su parte, tampoco se quedan cortas, nos permiten elegir cualquier ampli y pantalla (en el mercado actual, es más frecuente que las escenas no nos permitan esto), y decidir cuál de los bloques antes mencionados están activados. Esto viene genial, porque las escenas nos permiten conmutar entre dos, o hasta tres sonidos, virtualmente sin gap — o sea, sin silencio sonoro al cambiar entre ellas. Yo aproveché esto para diseñar dos escenas que hacían las veces de otros tantos canales de ampli (limpio y saturado, por ejemplo), asignándole a solo uno de ellos el loop de efectos. Eso me permite tener un limpio Febder con chorus y pasar velozmente a una saturación Bogner, con otra pantalla distinta y, tal vez, con EQ.
Profundizando un poco más en algo ya mencionado antes, a nivel sonoro el Amp Core Studio no es plug-and-play. Viene de fábrica con algunos parámetros descompensados entre presets, entre modelos de ampli y entre modelos de pantalla, principalmente los volúmenes. Algo que, aunque probablemente refleje comportamientos reales de los amplis que imita, yo prefiero ahorrarme ya que estamos en el mundo virtual. Lo cambiaría por una colección curada y domesticada de mis sonidos idealizados: para ello, una "remasterización" del abanico sonoro del Nux Amp Core Studio le vendría de perlas.
Claro, es algo que puedes arreglar a mano, corrigiendo volúmenes de presets y pantallas a tu gusto, pero consume un tiempo adicional que no aporta nada en realidad.
Como interfaz de audio
[Índice]La conexión USB-C del Amp Core Studio le permite acceder a un editor via software que amplía ligeramente las cosas que podemos hacer desde la propia unidad, pero también permite grabar directamente al ordenador. Y lo hace ofreciendo varios modos, uno convencional que no tiene grandes misterios, y otros que incluyen ventajas como la grabación simultánea de la señal seca. Algo que nos permitirá más tarde hacer reamp, algo que también se logra mediante los diferentes modos USB-C.
Conclusión general
[Índice]La serie Core de NUX es una propuesta equilibrada e interesante. El Komp Core Deluxe MKII sorprende poco pero cumple con solidez, el Drive Core MKII es práctico e ingenioso — me ha parecido refrescante poder elegir entre varios overdrives sin ser un pedal digital lo que tenía entre manos — , y el Amp Core Studio entusiasma por su estructura y facilidad, aunque requiere tiempo para sonar óptimo.
¿Dónde me imagino cada uno? El Komp Core podría encajar en casi cualquier pedalera, aunque me temo que, a excepción del precio, no acabo de ver la razón para elegirlo sobre otras opciones más compactas, sencillas y de eficacia probada como el Xotic SP Compressor. Ahora bien, el Drive Core Deluxe MKII es otra historia, ya que está tirado de precio, y no veo el motivo para gastar mucho más por otro overdrive de una gama media que solo haga un sonido y no tenga boost. El Drive Core Deluxe MKII es sólido y seguro que encuentras al menos un sonido que te sirva.
Con el Amp Core Studio lo veo clarísimo, está muy cerca de ser un pedal traga pedales casi ideal: no ocupa casi nada en pedalera, tiene MIDI, loop de efectos conmutable por escena y preset, es interfaz de audio, tiene salida de auriculares y muchos más detalles prácticos. Casi diría que no hay ningún producto que cumpla con todo esto a este tamaño; mi único reparo es que a nivel sonoro, la recompensa está lejos de ser inmediata. Hay que perseverar y, sobre todo, saber mínimamente a dónde vas y cómo llegar.
De lo contrario, puede ser una pesadilla para un principiante o para los puristas de lo analógico. Puede requerir elegir un modelo de ampli que no era el que imaginabas, combinarlo con una pantalla que no era la que sospechabas o incluso explorar hasta dar con una IR que mejore el resultado. Y eso sí puede ser un impedimento para disfrutarlo. Pero sabiendo esto de antemano y estando dispuesto a poner el esfuerzo, es hasta ahora uno de los Pedal Platforms con mejor interfaz de usuario y mejores utilidades del momento.